jueves, 19 de septiembre de 2013

Curso 2013-2014

Este curso no voy a impartir Historia de España, por lo que no habrá nuevas entradas en este blog. Sin embargo, Épila Historia 2 quedará a disposición de los interesados, con todos sus contenidos y enlaces de descarga.

Por tanto, a todos los interesados, un saludo hasta una ocasión que espero sea próxima.

martes, 18 de junio de 2013

Se acaba el curso...


...y por eso vamos a cerrar hasta septiembre este blog (no del todo: las entradas y los materiales quedarán a disposición de todo aquel que lo requiera). Y quiero aprovechar para agradecer, para felicitarnos mutuamente (profesor y alumnos) porque todos hemos contribuido a realizar estos blogs epilenses.

En octubre pasado los inicié como un instrumento para facilitar nuestra mutua tarea común (enseñar-aprender) en mis clases del Instituto Ródanas; en suma, una herramienta preparada para el uso de ciento y pico personas de 12 a 17 años. Sin embargo, muchos más desde España y desde Latinoamérica han decidido libremente utilizarlos, y qué más quiere un enseñante que enseñar (lo que le permite seguir aprendiendo)... En estos meses hemos recibido más de cuarenta mil visitas, y se han realizado varios miles de descargas de documentos.

Éste es un buen momento para expresar mi reconocimiento a todos ustedes, usuarios del blog, pero también a mis compañeros del Departamento de Geografía e Historia (Sara, Blanca y David), y a todo el claustro del Instituto. También a Rosa Garza Torrijo, del CPR Juan de Lanuza, que ha tenido a bien concedernos un premio Dardos. A todos, muchas gracias.

* * *
Pero nadie debe oxidarse durante el verano. Es una época para descansar, para leer, para hacer deporte, para leer, para estar con los amigos y con la familia, para leer, para ayudar en casa, para leer... Pero leer porque sí, porque uno mismo quiere: no hace falta ninguna razón especial para ello.

Y como algunos piensan equivocadamente que no les gusta leer, he preparado una receta sencilla para subsanar este ligero error: consiste en suministrarse una dosis diaria, pequeña, casi homeopática de literatura. Es válido para niños y adultos, no tiene efectos secundarios, y los resultados están garantizados. Lo llamaremos Un tocho al día (otro día explicaré porqué); el tratamiento comenzará el día 1 de julio, y el enlace para el correspondiente blog  está aquí.

domingo, 19 de mayo de 2013

El examen global y el de Selectividad


Recuerda que el examen obligatorio global tiene dos finalidades:
  • Para aquellos que han aprobado los tres parciales, mejorar la nota final.
  • Para aquellos que han suspendido uno o más parciales, recuperar la asignatura.

El examen será tipo PAU:
  • 90 minutos y seis páginas.
  • Dos opciones cerradas.
  • En cada opción, tres apartados:
        • Desarrollo de un tema (5 puntos).
        • Comentario de texto (3 puntos)
        • Dos preguntas, a elegir entre cuatro propuestas (2 puntos)
  • Es posible (pero no seguro) que se alternen un tema del siglo XIX y un texto del XX en una opción, y viceversa en la otra.
  • El examen se puntuará sobre 10. Las faltas de ortografía, los errores gramaticales, la mala presentación y el desorden en el ejercicio, podrán bajar, en el más extremo de los casos, hasta un máximo de un punto, que se restará de la calificación final obtenida.

Algunas indicaciones generales:
  • Todos las cuestiones deben situarse correctamente en su época, lo que puede constituir un buen comienzo de la respuesta.
  • Se admiten enfoques diversos, si están basados en corrientes historiográficas comúnmente admitidas.
  • La evaluación de las preguntas se basará en el grado de conocimiento de los hechos y conceptos más relevantes de las cuestiones objeto de examen así como el adecuado encuadre cronológico. Asimismo, se valorará el uso correcto de los términos históricos, la capacidad de síntesis y de relacionar, en suma, la madurez intelectual.
  • El comentario de texto podrá realizarse de manera libre o atendiendo al siguiente esquema:
        • Clasificación del texto (naturaleza, destino, autor, circunstancias histórico-temporales…)
        • Análisis del contenido del texto y crítica del mismo, si procede
        • Comentario o desarrollo del tema al que se refiere.
  • En los apartados siguientes, y en referencia a todo el repertorio, incluyo las páginas correspondientes de los Apuntes de Historia de España y del documento de Textos de Historia de España, algunas de las orientaciones proporcionadas a los correctores de las PAU en cursos pasados, y otros extremos que puedan resultar útiles.
  • En cualquier caso, todo lo que sigue tiene un carácter exclusivamente orientativo, y siempre se debe personalizar la respuesta. Para ello será práctico el uso del documento Textos de Historia de España. También es conveniente repasar la entrada correspondiente a los comentarios de texto, que puedes enlazar aquí.

TEMAS

1. El liberalismo (ideario y corrientes) y la oposición al mismo.
Cfr. pp 35-37 de los Apuntes, y pp 76-81 de los Textos.
  • Introducción: cómo y cuándo se implantó el liberalismo en España.
  • Programa ideológico: soberanía nacional, derechos individuales, igualdad jurídica, constitución, división de poderes, etc.
  • Organización del Estado: estado unitario, sistemas electorales, partidos de élites, etc.
  • Aplicación práctica: monopolización del poder y ausencia de alternancia política pacífica. Pronunciamientos militares (espadones) y revoluciones.
  • Programa económico: el liberalismo económico. Sus límites: el proteccionismo.
  • Corrientes liberales. Derechas e izquierdas. Sus distintas denominaciones a lo largo del siglo XIX.
  • La oposición absolutista: carlismo y tradicionalismo.
  • La oposición colectivistas: marxismo y anarquismo.
  • Conclusión: valoración de conjunto de la vida política en el siglo XIX, relacionándola con su gran fracaso en el XX.

2. El sexenio democrático.
Cfr. pp 30-34 de los Apuntes, y pp 61-75 de los Textos.
  • Introducción: significar el cambio profundo con respecto al reinado de Isabel II.
  • La Gloriosa revolución.
  • La etapa de Prim: el gobierno provisional, la Constitución de 1869, las transformaciones y los primeros conflictos. La búsqueda de un rey. Asesinato de Prim.
  • La etapa de Amadeo de Saboya: división de la coalición revolucionaria. Crecimiento de las oposiciones: cubana, carlista, republicana. Abdicación de Amadeo.
  • La etapa republicana: intento de diseño de un nuevo tipo de régimen liberal y su fracaso. Las guerras civiles y los pronunciamientos.
  • Conclusión: lo que perdurará del Sexenio en la siguiente etapa, la Restauración.

3. El sistema político de la Restauración y los elementos opositores al mismo. 
Cfr. pp 45-48 de los Apuntes, y pp 93-100 de los Textos.
  • Introducción: la Restauración como solución de la conflictiva implantación del liberalismo en España. El logro de la alternancia.
  • Origen de la Restauración.
  • Constitución de 1876.
  • Los partidos dinásticos y el turno de partidos.
  • Fraude electoral y caciquismo.
  • Oposición desde el liberalismo: los republicanos.
  • Oposición que rechaza el liberalismo: tradicionalismo, socialismo y anarquismo.
  • Oposición que rechaza el nacionalismo español: catalanismo y nacionalismo vasco.
  • Conclusión: Los límites del sistema: corrupción electoral y caciquismo.

4. La dictadura de Primo de Rivera.
Cfr. pp 54-56 de los Apuntes, y pp 113-116 de los Textos.
  • Introducción: crisis del liberalismo decimonónico (general en Europa) y crisis del sistema de la Restauración. Son las causas del pronunciamiento, que habrán de detallarse.
  • El pronunciamiento y las reacciones.
  • Actuación en los cuatro grandes problemas: colonial, político, social y económico.
  • Intentos de institucionalización.
  • La dimisión del dictador.
  • Conclusión: la dictadura como solución fallida (o sólo superficial) de los problemas españoles. La vuelta al sistema de la Restauración, inviable.

5. La II república.
Cfr. pp 58-63 de los Apuntes, y pp 118-146 de los Textos.
  • Introducción: la inviable vuelta al sistema de la Restauración tras la dictadura de Primo de Rivera. El pacto de San Sebastián y la sublevación de Jaca.
  • Origen: las elecciones municipales y la toma del poder. El gobierno provisional y las elecciones a Cortes.
  • La Constitución de 1931.
  • El bienio de izquierdas y sus reformas: militar, descentralizadora, agraria y religiosa.
  • Los conflictos y sublevaciones y el fin del bienio. Las elecciones de 1933.
  • El bienio de centro y derecha y sus reformas de las reformas.
  • Los conflictos y sublevaciones y el fin del bienio. Elecciones de febrero de 1936.
  • La etapa del Frente Popular y el aumento de la violencia política.
  • Conclusión: La Segunda República como primer régimen democrático en España, pero con graves carencias democráticas.

6. La guerra civil de 1936-1939.
Cfr. pp 64-68 de los Apuntes, y pp 147-162 de los Textos.
  • Introducción: en la segunda república, diversidad de fenómenos que influyen en el estallido de la guerra (causas de la guerra).
  • Desarrollo militar de la guerra.
  • División de España: geográfica (las dos zonas) y política (los apoyos a cada bando). La represión de los contrarios.
  • Evolución política de la España republicana.
  • Evolución política de la España nacional.
  • La dimensión internacional de la guerra.
  • Conclusión: las consecuencias de la guerra civil.

7. El franquismo.
Cfr. pp 69-72 de los Apuntes, y pp 163-178 de los Textos.
  • Introducción: La dictadura franquista como resultado tanto de un fenómeno mundial (crisis del liberalismo, “guerra civil europea”) como unos problemas internos españoles (fracaso del estado liberal-democrático).
  • Caracterización ideológica del franquismo. Su dificultad.
  • Los “poderes fácticos” y las “familias”.
  • Las bases sociales.
  • Evolución del franquismo (puede ser breve, pero claro y exacto).
  • La oposición al franquismo: su evolución.
  • El estado franquista: las Leyes Fundamentales.
  • El estado franquista: las instituciones.
  • Conclusión: inviabilidad del régimen. La transición a la democracia.

TEXTOS
  1. Constitución de 1812 [artículos 1 a 4, 8, 15-17, 92 y 366] Texto 
    Cfr. pp 20-21 de los Apuntes, y pp 41-43 de los Textos.
    Las Cortes de Cádiz y la constitución emanada de las mismas, con sus principales aportaciones y novedades, así como el contexto en el que se elabora. Análisis del cambio jurídico entre Antiguo y Nuevo Régimen.

  2. El político-militar [Texto de Madariaga] Texto
    Cfr. p 35 de los Apuntes, y pp 44, 46-47, 55-58, 61-62, 78 de los Textos.
    Papel de los militares en la España del XIX, los pronunciamientos. Caracterizar a los principales "espadones": Espartero, Narváez, O'Donnell, Prim..., sus semejanzas y sus diferencias. Causas y consecuencias de este fenómeno. Referencia al paréntesis de la Restauración, y diferenciación de este fenómeno con respecto a las dictaduras militares del siglo XX.

  3. Exposición de motivos del Decreto desamortizador de Mendizábal [1836] Texto
    Cfr. pp 25 y 38 de los Apuntes, y pp 50-52, 83 de los Textos.
    Desamortización de Mendizabal (carácter, principios, desarrollo y consecuencias). Se debe exponer el régimen tradicional de propiedad de la tierra (vinculaciones y amortizaciones...), y relacionar la desamortización con el conjuntode intereses ideológicos, políticos y económicos de la época. Se debe hacer alguna breve referencia a las desamortizaciones anteriores (Godoy) y posteriores (Madoz), señalando sus diferencias.

  4. La construcción del ferrocarril [Texto de Tortella] Texto
    Cfr. pp 40-41 de los Apuntes, y pp 83-85 de los Textos.
    La construcción del ferrocarril en España, sus características y aportación al desarrollo económico. Se puede relacionar y contraponer (según los casos) con los cambios que se producen en otros sectores económicos (industria, minería...).

  5. La Institución Libre de Enseñanza [Texto de Giner de los Ríos] Texto
    Cfr. pp 37-38 de los Apuntes, y p 82 de los Textos.
    Situación de la enseñanza en la España del XIX y principios que sustentan a la Institución. Origen de la ILE como consecuencia del fin del Sexenio Democrático. A relacionar con los cambios económicos (libertad de empresa), sociales (construcción de la sociedad burguesa) e ideológicos (krausismo y secularización promovida por la izquierda liberal).

  6. La Federación de Trabajadores de la Región Española y «La Mano Negra» [Manifiesto de la Comisión Federal, marzo de 1883] Texto
    Cfr. pp 37 y 42 de los Apuntes, y pp 80-81, 89-90, 112-113 de los Textos.
    El movimiento obrero durante la Restauración y sus variantes organizativas, con especial atención al anarquismo. Exponer tanto sus características ideológicas como su progresiva implantación desde el Sexenio. La "propaganda por el hecho". Aunque sea posterior al texto, será conveniente hacer algunas referencias a su gran crecimiento desde principios del siglo XX, y a su transformación en anarco-sindicalismo.

  7. Tratado de paz entre España y Estados Unidos (1898) Texto
    Cfr. p 49 de los Apuntes, y pp 100-106 de los Textos.
    La insurrección cubana y sus factores así como las consecuencias de la pérdida de las colonias. Importancia del regeneracionismo.

  8. Manifiesto del Frente Popular [1936] Texto
    Cfr. pp 62-63 de los Apuntes, y pp 141-142.
    Partidos que lo forman, programa, resultados electorales y primeras actuaciones políticas. Exponer no sólo los acuerdos sino los desacuerdos entre los componentes del Frente Popular. Relación con la crisis de la Segunda República.

  9. Ley de Bases de Reforma Agraria [1932] Texto
    Cfr. p 60 de los Apuntes, y pp 128, 134 de los Textos.
    El problema agrario como cuestión pendiente, características de la reforma agraria planteada y resultados de la misma. Exposición de las diferentes reacciones de las poblaciones agrarias. Se puede hacer una referencia breve a la evolución posterior durante el bienio de centro y derecha, durante la guerra civil, e incluso durante el franquismo (primero pueblos de colonización, después éxodo rural).

  10. La guerra civil de 1936-1939 [Texto de Paul Preston] Texto
    Cfr. p 66 de los Apuntes, y pp 150-151, 153-154, 159 de los Textos.
    Planteamiento general sobre la guerra civil, con la posibilidad de hacer mención a las distintas interpretaciones, causas y consecuencias. A relacionar con la dimensión internacional de la guerra civil (conflicto ideológico generalizado durante el período de Entreguerras).

  11. Ley de Responsabilidades Políticas [1939] Texto
    Cfr. p 70 de los Apuntes, y pp 164-166 de los Textos.
    El proceso de represión, sus mecanismos y víctimas. Relacionar las represiones de retaguardia en los dos bandos durante la guerra civil, y el carácter totalitario de la dictadura franquista en su etapa fascista. Referencia a la evolución del carácter represivo del régimen.

  12. La declaración del Congreso de Munich del Movimiento Europeo [1962] Texto
    Cfr. p 71 de los Apuntes y pp 174-175, 177-178 de los Textos.
    El texto admite centrar el comentario sobre diversos aspectos alternativos, tales como las carencias democráticas del franquismo, los sectores de oposición al franquismo o una reflexión sobre el momento concreto, nacional e internacional, en el que se produce la declaración.

PREGUNTAS
  1. Al-Andalus.
    Cfr. pp 7-8 de los Apuntes, y pp 11-13 de los Textos.
    Los musulmanes denominaron Al-Andalus al territorio hispano que conquistaron. Esta sociedad islámica permaneció desde principios del siglo VIII hasta finales del siglo XV, conociendo tres períodos políticos fundamentales: emirato independiente, califato y reinos de Taifas. Las victorias cristianas consiguieron que, desde mediados del siglo XIII, Al-Andalus quedara reducido a Granada. Los soberanos andalusíes ejercieron un poder absoluto, concentrando la máxima autoridad política y religiosa. En cuanto a su organización económica y social, cabe destacar la importancia que tuvieron las ciudades. Córdoba fue un gran centro cultural, sobre todo durante la época del Califato. En la agricultura destaca el impulso a los regadíos y la difusión de nuevos cultivos (agrios, arroz, algodón, azafrán). Su cultura estuvo influida por la religión, que impregnaba toda la vida pública. Tras ocho siglos de convivencia más o menos pacífica, la cultura islámica dejó huella. Actuaron como transmisores de conocimientos, sobre todo del mundo helenístico y del Oriente, nuestro léxico todavía conserva palabras de origen árabe y la huella de su arte se aprecia en construcciones tan notables como la mezquita de Córdoba, la Alhambra de Granada o la Aljafería de Zaragoza.

  2. La repoblación cristiana.
    Cfr. p. 9 de los Apuntes, y pp 13-16 de los Textos.
    El avance de los ejércitos cristianos sobre territorio musulmán vino acompañado de un movimiento de colonización del mismo, que implicó una nueva organización social, política y administrativa. En algunas zonas permanecieron los musulmanes (mudéjares), merced a unas capitulaciones de rendición generosas. Una parte de la tierra fue entregada a los nobles que participaron en la conquista, a las órdenes militares o a grandes concejos encargados de su repoblación. En determinadas tierras de frontera se otorgaron cartas de población y fueros, en los cuales se concedían ventajas y facilidades a quienes fuesen a poblar las tierras de frontera. Suelen allí fijarse los límites de los términos, las condiciones de acceso a la tierra, la concesión de franquicias y unas normas básicas sobre la vida municipal. Los fueros –a veces incluyen la primitiva carta de población- son instrumentos jurídicos, otorgados por los monarcas, que regulan la vida local. En Aragón, a partir de 1247, se produjo un proceso de unificación foral que dará lugar a los “Fueros de Aragón”, normas legales emanadas del Rey con las Cortes. Al hablar de la repoblación la respuesta podrá centrarse únicamente en Aragón o extenderse al conjunto de España.

  3. Los señoríos.
    Cfr. p. 9 de los Apuntes, y pp 16, 33 de los Textos.
    El señorío supone el dominio sobre tierras y hombres, delegado por el rey en otras personas o colectivos. El titular acumula jurisdicción, rentas y, casi siempre, patrimonio. Los titulares de los señoríos pueden ser nobles o eclesiásticos (órdenes militares, abades, obispos, cabildos, monasterios…). En virtud del señorío jurisdiccional los señores nombraban a las autoridades locales, ejercían la justicia y cobraban tributos. Era una fuente de poder político y económico. El señorío jurisdiccional va acompañado de la existencia de derechos de propiedad sobre una parte de la tierra, lo que se traduce en el cobro de unos cánones por el uso de la misma por parte del campesino. Los señoríos se originan en la Edad Media, frecuentemente como donaciones reales para pagar la colaboración en la Reconquista. Durante la Edad Moderna la creación de nuevos señoríos suele hacerse por medio de la enajenación de tierras de realengo. El resultado fue que miles de pueblos quedaron fuera de la autoridad directa de la corona. Fueron abolidos a comienzos del siglo XIX por los liberales.

  4. Mudéjares y moriscos.
    Cfr. p. 11 de los Apuntes, y pp 25-27 de los Textos.
    Conocemos con el nombre de mudéjares a los musulmanes sometidos a los poderes cristianos tras el avance de éstos sobre territorio de Al-Andalus. Se les permitió conservar su religión, sus costumbres, su cultura y se organizaron en aljamas que gozaron de la protección real. A lo largo de siglos hubo una coexistencia respetuosa entre cristianos y musulmanes. No obstante, son poblaciones sometidas a una cierta segregación social y a unas cargas fiscales mayores que las soportadas por la población cristiana. Con el tiempo, la tolerancia religiosa declinó, especialmente tras la toma de Granada, y se caminó hacia la unidad religiosa. La impronta mudéjar se aprecia en la arquitectura, con ejemplos sobresalientes en Aragón (Seo de Zaragoza, torres mudéjares de Teruel…). A comienzos del siglo XVI fueron obligados a convertirse al cristianismo, momento a partir del cual se les denomina cristianos nuevos o moriscos. El proceso de integración avanzó en algunas regiones, pero la presencia de los piratas berberiscos y de los turcos como enemigos de la monarquía, les hizo sospechosos. Fueron expulsados a comienzos del siglo XVII por el rey Felipe III, alegando su condición de malos cristianos y de potenciales aliados de los turcos. La medida afectó gravemente a Valencia y Aragón, dejando multitud de pueblos vacíos que fue necesario repoblar.

  5. El trabajo de los indígenas americanos tras la conquista: las encomiendas.
    Cfr. p. 12 de los Apuntes, y pp 21-23 de los Textos.
    Los españoles en América aspiraban, entre otras cuestiones, a sacar rendimiento de la conquista y esto no se podía hacer sin el trabajo de los indígenas. Sin embargo, una buena parte de éstos, no habituados al trabajo regular, no estaban dispuestos a trabajar voluntariamente, por lo que fue necesario obligarles. La encomienda suponía la entrega, por parte de la Corona, de un número de indios a un español en calidad de fuerza de trabajo. Así ocurrió en las Antillas, mientras en el continente, fundamentalmente, en lugar de repartir indios, se adjudicaron a los encomenderos los tributos de un cierto número de indígenas. Los encomenderos tenían obligación de instruir y evangelizar a los indios, pero reunir en un mismo instrumento la cristianización de los indígenas y la explotación de su fuerza de trabajo resultó un fracaso. Los misioneros (Montesinos, Las Casas…) denunciaron la explotación del indio y fueron escuchados en España, contribuyendo así a la mejora paulatina de la situación del indígena americano.

  6. La Inquisición.
    Cfr. pp. 10-11 de los Apuntes, y pp 18-19, 27-28 de los Textos.
    Fue un tribunal eclesiástico encargado de la persecución de la herejía, que se desarrolló en Europa a partir del siglo XII. La Inquisición española tiene una larga vida, que se extiende desde 1479 hasta 1834. La Inquisición desarrollada por los RR. CC. jugó un papel político, siendo un poderoso instrumento de control social al servicio del Estado monárquico. Estuvo vinculada al Estado y a la cabeza de la organización estaba el Inquisidor general y el Consejo Supremo. El territorio quedó dividido en distritos, en cada uno de los cuales había un tribunal. Sus procedimientos judiciales (proceso secreto, delación anónima…) y sus consecuencias (graves penas, confiscaciones, infamia…) generaban miedo y la convirtieron en una institución temible. Al principio se ocupó de los judeoconversos, después de los moriscos y, desde mediados del XVI, de los cristianos viejos, tratando de conformar un modelo de religiosidad homogéneo en todo el país.

  7. El fin de la hegemonía de la monarquía hispánica: la paz de Westfalia.
    Cfr. pp. 14-15 de los Apuntes, y pp 28-30 de los Textos.
    Durante los reinados de Carlos I y Felipe II quedó firmemente asentada la hegemonía de España en Europa y el Mediterráneo. El reinado de Felipe III transcurre en calma, pero en el de Felipe IV el declive en Europa será un hecho. En el interior hubo de hacer frente a las rebeliones de Cataluña y Portugal. En el exterior, los fracasos en la guerra de los treinta años (lucha por el predominio político en Europa, divisiones religiosas y políticas en Alemania) supone el fin de la hegemonía de los Austrias. Holanda, Dinamarca, Inglaterra, Suecia y, más tarde, Francia, serán los rivales de España y el Imperio alemán. La paz de Westfalia (1648) reconoce el derecho de los príncipes alemanes a escoger la religión de sus estados y la independencia de Holanda, además de ventajas territoriales para Suecia. En la paz de los Pirineos (1659), se pone fin a la guerra con Francia, a la que se cedían el Rosellón, la Cerdaña y algunas plazas en los Países Bajos. Es el fin de la hegemonía en el continente, que pasa a manos de Francia, mientras el dominio de los mares lo ejercerán holandeses e ingleses.

  8. Los decretos de Nueva Planta y el fin del foralismo.
    Cfr. pp. 15-16 de los Apuntes, y pp 30-32 de los Textos.
    Tras la muerte de Carlos II sin descendencia se planteó un problema sucesorio, que llevó a la guerra de sucesión, donde se enfrentaron los dos pretendientes al trono, Felipe de Anjou y el Archiduque Carlos, apoyados por las distintas potencias europeas, dado que el conflicto se internacionalizó. El triunfo de Felipe V supuso, siguiendo el modelo francés, una reorganización del Estado, que implicó una centralización política y administrativa. Con los decretos de Nueva Planta desaparecieron las instituciones políticas propias de los diversos territorios forales (Cortes, Diputación, Justicia), con la excepción del País Vasco y Navarra. Sólo pervivieron los fueros civiles en algunas regiones, como es el caso de Aragón. Los Borbones establecieron una estructura político-administrativa uniforme y centralista en todo el territorio, basada en el modelo de Castilla, lo que favoreció el absolutismo monárquico.

  9. La Ilustración.
    Cfr. p. 16 de los Apuntes, y p 33 de los Textos.
    La introducción de las ideas ilustradas en España fue lenta y tardía, sin duda por la falta de una pujante burguesía y las resistencias de sectores eclesiásticos y aristocráticos. Los ilustrados fueron un grupo reducido de intelectuales (Feijoo, Campomanes, Jovellanos, Aranda, Olavide, Floridablanca…) que analizaron la problemática de la nación y propusieron reformas con el objetivo de superar el atraso del país. De su seno, tras la correspondiente evolución, surgirá el pensamiento liberal que triunfará en el siglo XIX. Critican a la Iglesia, pero aspiran a una práctica religiosa más rigorista y defienden la capacidad del rey para intervenir en asuntos eclesiásticos (regalismo). Por otro lado, confían en el impulso reformista de la monarquía. Entre las preocupaciones de los ilustrados está la educación, pues sólo la cultura podía sacar al país del atraso. En este terreno se enfrentaron a la Iglesia, que controlaba la educación, y defendieron la necesidad de una enseñanza útil y práctica, abierta a las nuevas ciencias y a las novedades del extranjero. El atraso económico también les preocupó y censuraron el fuerte predominio de la propiedad aristocrática y eclesiástica, el excesivo control estatal de las actividades económicas y el desconocimiento de los nuevos avances técnicos que se divulgaban por Europa. Los ilustrados criticaron los privilegios de la nobleza o el elevado número de eclesiásticos y defendieron la dignidad de los oficios mecánicos (fin de la deshonra legal del trabajo).

  10. Características del Antiguo Régimen.
    Cfr. p. 17 de los Apuntes, y p 34 de los Textos.
    La expresión Antiguo Régimen designa al período de la historia anterior a la revolución francesa, a las revoluciones liberales y a la industrialización. Se caracteriza por la monarquía absoluta como forma de gobierno, aunque mediatizada por la fuerte presencia de la Iglesia en la vida pública (regulación del matrimonio, importancia de la jurisdicción eclesiástica, diezmos, primicias…) y la existencia de instituciones representativas de los distintos estamentos (Cortes). La economía es fundamentalmente agraria, con una gran presencia de la nobleza y la Iglesia como propietarios. Además, los patrimonios de la nobleza están vinculados, no pueden venderse (mayorazgos), lo que dificulta el acceso a la tierra de los campesinos. Una buena parte de los campesinos vivían en señoríos, sometidos a la jurisdicción de los señores y debiendo abonar los correspondientes tributos por el uso de la tierra. La industria es artesanal y el comercio tiene serios obstáculos debido a la lentitud y carestía de los medios de transporte. La sociedad se basa en el privilegio, en la desigualdad jurídica de los grupos privilegiados (nobleza, clero), y en el nivel económico de las personas, cuestiones no siempre coincidentes. Su fin llegó con la irrupción del liberalismo y el triunfo del capitalismo.

domingo, 5 de mayo de 2013

El Franquismo y la Transición

Godofredo Ortega Muñoz, Castaños, 1969
El fracaso del sistema liberal (en el siglo XIX, en el reinado de Alfonso XIII, en la II República), continuamente atacado con intentonas revolucionarias, pronunciamientos militares, y con su misma corrupción interna, concluyó en el establecimiento de la prolongada dictadura del general Franco. Si en 1936 quedaba una mera democracia formal, pronta a desvanecerse, pasarán cuarenta años antes de que vuelvan a implantarse las bases de un sistema democrático.

El franquismo fue una dictadura militar de carácter personal, porque desde septiembre de 1936 el ejército y el propio régimen reconoció en la persona del dictador (aunque no lo denominara así) la fuente de toda autoridad, y el origen de todo poder. Su aparición durante la guerra civil, cuando la división de la sociedad española era más profunda, hizo que su base de apoyo estuviese constituida por diversas y opuestas corrientes ideológicas (falangismo, carlismo, y neta reacción). Sólo les unía el rechazo hacia el otro bando: eran profundamente anticomunistas, antiliberales y antiautonomistas. Lejos de ser un inconveniente, lo contradictorio de sus planteamientos resultó una ventaja para Franco, que estableció un curioso sistema de contrapesos entre ellos.

El Franquismo manifestaba así su oportunismo perpetuo, y se revestió de los más variados ropajes en función "de los vientos que corren": de una etapa plenamente totalitaria de sintonía nazifascista, pasará a un conservadurismo de talante pronorteamericano; de un estatalismo económico, a una liberalización económica; de un nacionalsindicalismo absorbente, a una laxa democracia orgánica. Lo único que se mantendrá constante es el dominio total del dictador, responsable último y único de todos estos avatares.

La oposición al franquismo tuvo un carácter diverso y cambiante. Aunque se mantuvo un gobierno de la República en el exilio (en los últimos años, presidido por el prestigioso historiador Claudio Sánchez Albornoz), la única fuerza política que llevó a cabo una acción considerable y persistente en este sentido (al precio de una dura represión) fue el Partido Comunista. Sin embargo sus tácticas y planteamientos cambiaron no menos que el propio franquismo: del estalinismo más acérrimo pasó a la aceptación de la democracia; de promover la invasión militar y el combate guerrillero, pasó a la infiltración (más exitosa) en la sociedad y en las propias instituciones del régimen.

La apertura del régimen en sus últimos años, generada por sus tardíos pero considerables éxitos económicos y sociales, propiciará la aparición de nuevas corrientes de oposición, tanto democráticas como totalitarias, en sintonía con la época. Y en este sentido será decisiva la latente división de los propios cuadros del franquismo entre aperturistas e inmovilistas. La posterior transición a la democracia, cuando muera el dictador, será consecuencia de este nuevo paisaje, muestra de una sociedad profundamente transformada a lo largo de los últimos años.

El Franquismo.

La Transición

Para las PAU corresponde preparar:

Tema 7: El Franquismo.

Texto: Ley de Responsabilidades Políticas [1939].
«Art. 1.° Se declara la responsabilidad política de las personas, tanto jurídicas como físicas que desde 1.° de octubre de 1934 y antes de 18 de julio de 1936, contribuyeron a crear o a agravar la subversión de todo orden de que se hizo víctima a España y de aquellas otras que, a partir de la segunda de dichas fechas, se hayan opuesto o se opongan al Movimiento Nacional con actos concretos o con pasividad grave.
Art. 2.° Como consecuencia de la anterior declaración [...] quedan fuera de la ley todos los partidos y agrupaciones políticas y sociales que, desde la convocatoria de las elecciones celebradas el 16 de febrero de 1936, han integrado el llamado Frente Popular, así como los partidos y agrupaciones aliados y adheridos a éste por el solo hecho de serlo, las organizaciones separatistas y todas aquellas que se hayan opuesto al Triunfo del Movimiento Nacional [...].
Art. 3.° Los partidos, agrupaciones y organizaciones declaradas fuera de la ley, sufrirán la pérdida absoluta de sus derechos de toda clase y la pérdida total de sus bienes. Estos pasarán íntegramente a ser propiedad del Estado [...].» 
Boletín Oficial del Estado, 13 de febrero de 1939.Reproducido en José Hernández y otros,
Historia de España. 2.º Bachillerato. Fuentes documentales, Madrid, Akal, 2004, p. 132.

Texto: La declaración del Congreso de Munich del Movimiento Europeo [1962].
«El Congreso del Movimiento Europeo, reunido en Munich los días 7 y 8 de junio e 1962, estima que la integración, ya en forma de adhesión, ya de asociación de todo país a Europa, exige de cada uno de ellos instituciones democráticas, lo que significa en el caso de España, de acuerdo con la Convención Europea de los Derechos del Hombre y la Carta Social Europea, lo siguiente:
1. La instauración de instituciones auténticamente representativas y democráticas que garanticen que el Gobierno se basa en el consentimiento de los gobernados.
2. La efectiva garantía de todos los derechos de la persona humana, en especial los de libertad personal y de expresión, con supresión de la censura gubernativa.
3. El reconocimiento de la personalidad de las distintas comunidades naturales.
4. El ejercicio de las libertades sindicales sobre bases democráticas y de la defensa por los trabajadores de sus derechos fundamentales, entre otros medios por el de huelga.
5. La posibilidad de organización de corrientes de opinión y de partidos políticos con el reconocimiento de los derechos de la oposición.
El Congreso tiene la fundada esperanza de que la evolución con arreglo a las anteriores bases permitirá la incorporación de España a Europa […].»
Resolución aprobada por los 118 delegados españoles y remitida al Congreso Europeo
(S. de Madariaga, España, Madrid, 1978, pp. 542-543). Reproducido en J. A. Hernández y otros,
Historia de España. 2.º Bachillerato. Fuentes documentales, Madrid, Akal, 2004, pp. 139-140.

Para saber más

Incluyo unos cuantos chistes, caricaturas e ilustraciones, publicados en los más diferentes medios, que hacen referencia a las cuestiones que estudiaremos en el tema. Pueden ser muy útiles para reforzar lo aprendido, pero han de tenerse en cuenta los diferentes planteamientos de cada uno de ellos (a favor, en contra, dentro o fuera de España...).

La etapa totalitaria
Ilustración de Cozzi para la portada de la revista infantil Pelayos del 2 de octubre de 1938

Ilustración de Aróztegui para la portada de la revista Flechas y Pelayos, del 20 de noviembre de 1939


David Low, publicado en el Evening Standard el 2 de mayo de 1940

New York Times, 15 de diciembre de 1940

Ilustración para el libro War in Europa (1941)

Herblock, en el Washington News, del 20 de marzo de 1941

Aróztegui, portada de Flechas y Pelayos del 30 de noviembre de 1941

El aislamiento
David Low en Evening Standard, 4 de enero de 1946

Illingworth, 2 de junio de 1947

"All are gone, the old familiar fasces." Herblock en The Washington Post (1952)

Alineamiento con Occidente
David Low en Daily Herald, 20 de julio de 1951

Franco vestido de soldado norteamericano. Cummings, en Daily Express, 17 de enero de 1955

El Desarrollismo
El éxodo rural. Mingote en ABC (1966)
La emigración. Chumy Chúmez en Madrid, 27 de septiembre de 1971

Mingote en ABC, junio de 1967

La apertura y sus límites
Mingote en ABC, 13 de junio de 1972

Chumy Chúmez el el diario Madrid, 10 de octubre de 1968

Chumy Chúmez el el diario Madrid, 3 de abril de 1971

Sobre las elecciones del tercio familiar. Mingote en ABC (1971)

Oposición e inmovilistas
Chumy Chumez en Hermano Lobo, 5 de octubre de 1972

Mingote en ABC, 31 de diciembre de 1972

Mingote en ABC,1974
El final: dos posibilidades
Stanley Franklin en The Sun, 25 de noviembre de 1975

Perich en La Vanguardia, 26 de noviembre de 1975

martes, 23 de abril de 2013

La orilla donde ríen los locos

José Gutiérrez Solana, Recogiendo a los muertos, 1937
La Segunda República fue una democracia con graves carencias, pero que posibilitó elecciones libres y alternancias políticas. La población, aunque cada vez más politizada, no respaldó de forma masiva ninguna de las numerosas intentonas revolucionarias y golpistas, independientemente de su orientación: con la significativa excepción de la revolución de Asturias, sólo se lanzaron a la calle para tomar el poder una minoría de los anarquistas, de los derechistas, de los socialistas o de los catalanistas.

El golpe militar de julio de 1936 fracasó también, pero sólo hasta cierto punto: el gobierno formado por republicanos de izquierdas lo derrotó, pero sólo en ciertas regiones. Este doble fracaso supone el triunfo, en ambos bandos, de los elementos más extremistas, de los partidarios del todo o nada, de los que consideran periclitada la legalidad liberal, de los que están ansiosos por implantar su fórmula perfecta para resolver de una tacada todos los problemas de la sociedad española. En las dos Españas serán ellos los catalizadores del resto de la población, empleando a fondo dos herramientas básicas: la propaganda y la represión.

La Guerra Civil supone el fin de la democracia: es llamativo que en ambas zonas se celebran con entusiasmo los aniversarios de su inicio. En la España gubernamental triunfa una revolución social de signo anarquista y marxista, con una difícil convivencia interna. En la España sublevada se establece pronto una dictadura personal que, ideológicamente, se apoya en elementos tradicionalistas y falangistas.

La evolución de la guerra y su resultado final será consecuencia de estos y otros factores, y especialmente de la compleja situación internacional de fines de los años treinta. La Unión Soviética de Stalin, la Alemania de Hitler y la Italia de Mussolini se implican profundamente en el conflicto, apoyando los primeros a los autollamados republicanos, y los otros dos a los autodenominados nacionales. Paradojas de la historia: apenas unos meses después de terminada la guerra civil, los irreconciliables comunistas y nazis se reconcilian, y se ponen de acuerdo... en repartirse Europa oriental. Es el inicio de la Segunda Guerra Mundial.



Para las PAU corresponde preparar:

Tema 6: La guerra civil de 1936-1939.

Texto: La guerra civil de 1936-1939 [Texto de Paul Preston].
La investigación local en España y en otros lugares ha enriquecido nuestra perspectiva sobre la crisis de los años treinta y también ha subrayado uno de los dos factores fundamentales de la Guerra Civil española: en sus orígenes, consistió en una serie de enfrentamientos sociales españoles, y muchos de los problemas que surgieron en la zona republicana derivaron de una resolución incompleta de algunos de esos conflictos. Los investigadores españoles y extranjeros han contribuido a confirmar la otra verdad fundamental sobre la guerra: durante la misma y tras ella, constituyó un episodio más en la gran Guerra Civil europea que acabó en 1945. La derrota final de la República española se produjo después de un cerco constante de tres años durante los cuales se vio asediada desde fuera y desde dentro; desde fuera, por las fuerzas del fascismo internacional y sus cómplices inconscientes entre los Estados democráticos y, desde dentro, por las fuerzas de la extrema izquierda que antepusieron sus ambiciones revolucionarias al propósito de realizar un esfuerzo bélico centralizado.
P. Preston, La República asediada. Hostilidad internacional y conflictos internos durante la guerra civil, Barcelona, Península, 1999, pp. 11-12.


Para saber más

Legislaciones durante la guerra civil española. Los dos bandos enfrentados tuvieron necesidad de dictar novedosas disposiciones legales para organizar (según nuevos principios) la vida en la retaguardia y en el frente.

Canciones de la Guerra Civil. En los dos bandos se establecieron nuevos himnos oficiales o semioficiales. Pero las necesidades propagandísticas favorecieron una floración musical extraordinaria, de la que aquí se presenta una selección en mp3.

Tierra de España es un excelente documental propagandístico realizado por Joris Ivens en 1937, con guión y locución de Hemingway. Aquí se presenta la primera parte. El resto, en YouTube.


Defensores de la fe, realizado por el también norteamericano Russel Palmer en 1938, es otro excelente documental propagandístico de signo contrario. Al igual que con el anterior, sólo presento la primera parte.



Nota: el título de esta entrada procede (con una ligera modificación) de la muy recomendable novela titulada Crónica del Alba, del más prolífico autor aragonés del siglo XX, Ramón J. Sender.

martes, 19 de marzo de 2013

Una ocasión perdida: la Segunda República


La caída de monarquía se produjo de un modo inesperado. Tras el largo paréntesis de la dictadura de Primo de Rivera, en abril de 1931 el gobierno Aznar convocó elecciones municipales en toda España. En las principales ciudades vencieron las candidaturas republicanas, y buena parte de la población consideró este resultado como un plebiscito. El comité republicano resultado del Pacto de San Sebastián ocupó el poder, y el gobierno y el propio rey aceptaron la situación. Alfonso XIII marchó inmediatamente al exilio.

Se estableció un gobierno provisional formado por republicanos y socialistas que proclamó la república y convocó elecciones consituyentes, con el resultado de unas Cortes con mayoría de izquierdas. Éstas elaboraron una constitución netamente de izquierdas, que discriminaba a los sectores sociales de derechas. Dos años después, en unas nuevas elecciones, el resultado fue el inverso, pero la actitud de la nueva mayoría de centro y de derechas será similar a la anterior: gobernará exclusiva o principalmente para los "suyos". Y en 1936 unas nuevas elecciones (muy radicalizadas en ambos sectores) devolverá el poder a las izquierdas.

La Segunda República fue una democracia con graves carencias. Pero quizás lo peor fue la escasez de comportamientos democráticos y tolerantes (aunque también los hubo, y desde todas las posiciones políticas): sus propios dirigentes prefirieron el enfrentamiento a la colaboración y el acuerdo. Además, la conflictividad y el desprecio por la legalidad fue constante: se produjeron varios intentos de revolución anarquista y un golpe de estado derechista contra gobiernos de izquierdas, y otros intentos de signo anarquista, socialista y catalanista contra gobiernos de centro y derecha. Todos ellos fracasaron, pero causaron miles de víctimas y sobre todo la generalización del odio y del miedo al contratrio.


Para las PAU corresponde preparar:

Tema 5: La Segunda República.

Texto: Ley de Bases de Reforma Agraria [1932].
[...] Serán suceptibles de explotación las tierras incluidas en los siguientes apartados:
1.º Las ofrecidas voluntariamente por sus dueños siempre que su adquisición se considere de interés por el Instituto de Reforma Agraria [...].
5.º Las que por las circunstancias de su adquisición, por no ser explotadas directamente por los adquirentes y por las condiciones personales de los mismos, deba presumirse que fueran compradas con fines de especulación o con el único objeto de percibir su renta [...].
7.º Las incultas o manifiestamente mal cultivadas en toda aquella porción que, por su fertilidad y favorable situación permita un cultivo permanente, con rendimiento económico superior al actual [...].

Expropiaciones y ocupaciones realizadas a raíz de la Ley de Bases de Reforma Agraria de 1932 (hasta el 31 de diciembre de 1934)

N.º de fincas
Extensión en Has.
N.º de familias asentadas
Expropiadas
468
89.133
8.609
Ocupadas
61
27.704
3.651

Asentamientos realizados bajo el Gobierno del Frente Popular (marzo-julio de 1936)
Mes
Superficie ocupada en Has.
Familias campesinas asentadas
Marzo
249.616
72.428
Abril
150.490
21.789
Mayo
41.921
5.940
Junio
55.282
3.855
Julio
74.746
6.909
Total
572.055
110.921
J. Hernández y otros, Historia de España. 2.º Bachillerato. Fuentes documentales, Madrid, Akal, 2004, pp. 120-121.

Texto: Manifiesto del Frente Popular [1936].
Los partidos republicanos Izquierda Republicana, Unión Republicana y el Partido Socialista, en representación del mismo y de la Unión General de Trabajadores; Federación Nacional de Juventudes Socialistas, Partido Comunista, Partido Sindicalista, Partido Obrero de Unificación Marxista, sin perjuicio de dejar a salvo los postulados de sus doctrinas, han llegado a comprometer un plan político común que sirva de fundamento y cartel a la coalición de sus respectivas fuerzas en la inmediata contienda electoral y de norma de gobierno que habrán de desarrollar los partidos republicanos de izquierda, con el apoyo de las fuerzas obreras, en el caso de victoria.
I. Como suplemento indispensable de la paz pública, los partidos coaligados se comprometen:
1.º A conceder por ley una amplia amnistía de los delitos político-sociales cometidos posteriormente a noviembre de 1933 […].
VII. La República que conciben los partidos republicanos no es una República dirigida por motivos sociales o económicos de clase, sino un régimen de libertad democrática, impulsado por razones de interés público y progreso social. Pero precisamente por esa definida razón, la política republicana tiene el deber de elevar las condiciones morales y materiales de los trabajadores hasta el límite máximo que permita el interés general de la producción, sin reparar, fuera de este tope, en cuantos sacrificios hayan de imponerse a todos los privilegios sociales y económicos.
VIII. La República tiene que considerar la enseñanza como atributo indeclinable del Estado, en el superior empeño de conseguir en la suma de sus ciudadanos el mayor grado de conocimiento y, por consiguiente, el más amplio nivel moral por encima de razones confesionales y de clase social.
Reproducido en A. Fernández y otros, Documentos de Historia Contemporánea de España, Madrid, Actas, 1996, pp. 481-483.



Para saber más:

Debes frecuentar el capítulo correspondiente de Textos de Historia de España.

Puedes consultar la legislación de este período (por lo menos, la Constitución) en este documento: Legislación de la Segunda República, que se descarga pinchando aquí.